Somos seres en proceso

Es posible que alguna vez hayamos escuchado la frase “Esto también pasará”, originalmente un proverbio persa que refleja la temporalidad y la naturaleza transitoria de la condición humana.

El poeta sufí persa Attar de Nisahpur contó la historia de un rey poderoso quien convocó a todos los sabios de su reino y les pidió un pequeño obsequio que pudiera guardar en su anillo y lo ayudara a transitar exitosamente las vicisitudes y dificultades de la vida. Cuentan que ninguno de los sabios pudo pensar en una herramienta tan pequeña como el rey les había solicitado; sin embargo, uno de los sirvientes más leales del rey le dio una pequeña pieza de papel y le pidió no leer el mensaje hasta que estuviera pasando por un tiempo difícil. Ese tiempo llegó, el reino fue invadido por un ejército hostil y cuando el rey se sintió en la orilla del abismo, leyó el mensaje que contenía la diminuta pieza de papel guardada en su anillo que decía: “Esto también pasará”. Esas tres simples palabras lo ayudaron a transitar por aquellos momentos dolorosos con éxito. La victoria arribó y cuando el reino se encontraba en plena algarabía, el sirviente se acercó al rey y le pidió leer el mensaje nuevamente. El rey, desconcertado, le dijo que no había necesidad, pues era un momento de júbilo para él y el reino, a lo que el sirviente respondió: También estos momentos se desvanecerán tarde o temprano.

Esta historia puede ayudarnos a estar conscientes de los ciclos interminables por los que navegamos en nuestras vidas. No somos seres fijos, sino más bien seres en movimiento que continuamente transitamos en un contexto de transitoriedad.

Puede ayudarnos a reconocer que somos seres en proceso y que en éste, necesitamos ajustar continuamente nuestros recursos y actitudes para florecer independientemente de las condiciones. Nos puede ayudar vivir con mayor congruencia en un contexto que cambia todo el tiempo.

Pero sobre todo, nos puede ayudar a vivir plenamente nuestras vidas imperfectas, honrando nuestros procesos y quizá incluso aprendiendo de ellos.

Deja un comentario